Montessori en casa

La crianza con autonomía física en los primeros años se transformará en autonomía intelectual en la niñez, y en autonomía moral en la juventud.

 Los primeros años de vida son fundamentales en la crianza, porque a partir de las primeras experiencias, el niño constituye sus habilidades básicas, forma su personalidad y define su estilo de aprendizaje. 

 Sabemos que muchas veces la crianza de nuestros hijos está atravesada por costumbres que heredamos y repetimos sin  demasiada reflexión, generando obstáculos a su desarrollo autónomo.

Uno de los aspectos fundamentales de la perspectiva Montessori es el desarrollo de la autonomía, quese produce desde el nacimiento; la Dra. Montessori afirma que la primera infancia es el período de desarrollo más importante de la vida.

El orden, las rutinas, los límites, el espacio físico, las actitudes del adulto y las actividades que ofrecemos a los niños son un campo rico para que adquieran progresivamente el desarrollo de su autonomía, autonomía que el niño puede adquirir desde la más temprana edad. Esa autonomía no significa dejarlo solo, sino ayudarlo a adquirir logros por sí mismo: “Ayúdame a hacerlo por mí mismo”.